Existe la manera de salvar vidas sin matar la economía
Aún nos encontramos en medio de la emergencia causada por la pandemia del COVID 19, y la mayoría de los países del planeta se encuentran en algún grado de cuarentena, lo cual a derrumbado la economía global al reducir a su máxima expresión la demanda de bienes y servicios,.Basta con ver noticias de varias partes del mundo, para darnos cuenta cómo cada país está enfrentando la contingencia a su manera, lo que aviva las críticas locales hacia cada gobierno al comparar sus acciones con las de otros países, pero en lo que parece que todos estamos de acuerdo, es en encontrar la manera si es que existe, de salvar la mayor cantidad de vidas sin acabar con la economía.
Como lo comente anteriormente aún nos encontramos en medio de la emergencia por la pandemia, y es muy pronto para indicar cual es la manera correcta de evitar la propagación del virus, muy probablemente la respuesta correcta es el aislamiento social, medida que ya sea por iniciativa propia o como último recurso, se ha estado implementado a nivel global, pero a un costo terrible para la economía del planeta.
En una entrevista otorgada al programa de radio Marketplace de NPR el ganador del premio nobel de economía Paul Romer presentó una propuesta intermedia que a su parecer debe ser implementada en Estados Unidos, similar a lo que se hizo en Corea del Sur, la cual consiste en realizar pruebas de detección del virus de forma masiva y proveer igualmente de forma masiva de materiales de protección a la población.
Para que aquellas personas con resultados negativos del Covid 19 en las últimas 24 horas, puedan regresar a sus centros de trabajo, e incluso habla de que la prueba negativa pueda ser requisito para ingresar a lugares de concentración de personas como supermercados, y que aquellos que no presenten una prueba negativa, solo puedan ingresar a dichos lugares con los dispositivos de seguridad requeridos. Mientras que se debe aislar a aquellos que resulten positivos al virus y con quienes hayan tenido contacto, para de esta manera aislar solo a aquellas personas que en realidad lo necesiten.
Pero esta propuesta representa un gran problema, el acceso a los recursos, en estos momentos en que la emergencia se vive a tiempo real, las decisiones de los gobernantes deben tomarse con la información y los recursos con los que actualmente se cuentan, probablemente ningún país cuenta con la cantidad de pruebas suficientes siquiera para realizar pruebas a muestras significativas de su población, mucho menos para hacerlo cada 24 o 48 horas a la mayoría de sus ciudadanos y en estos momentos abundan las historias como los gobiernos a nivel mundial no están pudiendo abastecer siquiera a su personal médico de los aditamentos para protegerlos de ser contagiados.
Sin duda la propuesta planteada por el profesor Romer es imposible de implementar en estos momentos de propagación exponencial del virus, pero es una muestra de lo que puede suceder en los meses intermedios entre la emergencia y la vuelta a la normalidad en los cuales los gobiernos del mundo deberán seguir controlando a la población para prevenir que se generen nuevos brotes de contagio y que volvamos a lo que estamos viviendo en estos momentos.
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